Las ferias son los principales circuitos cortos establecidos en la cadena de comercialización de los productos de la agricultura familiar campesina y urbana, evitando así la acción de intermediarios entre los productores y el comprador final. En la actualidad, existen cerca de 290.000 familias en el sector de la pequeña agricultura, de las cuales más de 250 mil son usuarias de los programas de inversión, capacitación, asistencia técnica y financiera de INDAP, Sercotec, Fosis, Sernatur y Fondo Esperanza.

Por ello, uno de los énfasis del programa de comercialización es la creación de pequeños mercados y ferias. Coñaripe cuenta con una de las ferias más antiguas de la comuna de Panguipulli. Hablamos de la Asociación Indigena Paillalafquen, la cual  se encuentra ubicada al final de calle Las Tepas, a un costado del Consultorio de Coñaripe. Un lugar con una tradición de más de 30 años, donde han pasado variadas generaciones para entregar lo mejor de sus productos gastronómicos y artesanales.

Este es su primer año que están trabajando con ganas y entusiasmo en feriados largos de invierno, para recibir a los turistas que nos visitan cada año. Almuerzos típicos, empanadas de pino y queso, artesanía en madera y lanas, sopaipillas con su rico pebre, venta de huevos, miel y diferentes pastas para deleitar los paladares del visitante.

Son aproximadamente 40 socios, de los cuales 16 integrantes son los más activos, todos de Coñaripe, siendo una asociación formada por comunidades, como lo es Pilinhue, Newenche, Carlos Antimilla, José María Lemonao y Culan.

En la ocasión pudimos ver como de turistas santiaguinos, degustaban los productos de comida, como sopaipillas y empanadas, quienes indicaron que el sabor de la comida del sur es muy exquisita, no comparándose a la que encuentran en Santiago.

www.noticiaspanguipulli.cl se contactó con la presidenta de la agrupación, Elsa Limpayante, quien nos señala que “cada integrante se preocupa de recibir siempre con lo mejor a los turistas. Es nuestro primer invierno que empezamos a trabajar, ya que los mismos turistas de verano nos pedían que abriéramos en invierno. Propuse la idea con los socios y estuvieron de acuerdo en probar en Semana Santa, donde nos fue excelente”, indicó la dirigente de la agrupación, agregando que desde la semana pasada llevan atendiendo al público.

La feria cuenta con una variedad de precios, con la idea de que nadie quede sin degustar los productos que exponen para la venta. Los locatarios se encargan de recibir con el mejor de los ánimos y carisma, con el fin de cautivarlos y volver a recibirlos en sus puestos de comida. La mayoría de las especias que se usan para la comida, son cosechadas por los mismos agricultores, dándole un toque especial a cada plato que sirven.

No pueden dejar de invitar a sus amigos y amigas a degustar de un momento agradable con la mejor atención y comida de la zona.